martes, 20 de abril de 2010

Directed By 4: MI DULCE ANA (Alvaro Casalino) - Perú

Titulo:   Mi dulce Ana

Director: Alvaro Casalino

Género: Suspenso

Elenco:
Audrey Tatou (Ana)
Vincent Cassel (Giullame)
Albert Dupontel (Hombre)
Juliette Binoche  (Ivette)

Musica:
krzysztof Penderecki – polymorphia (click
Dave Brubeck- Three to get ready (Click)
Andrea Bocelli - Les feuilles mortes (Click)






Argumento:
Mientras pasan los créditos, oímos ruidos de cubiertos y platos, siendo removidos, como si alguien estuviese preparando algo. Cuando los créditos terminan, vemos a una mujer menuda, que a primera vista parecería una adolescente.
Una vez ha terminado de preparar la comida, la sirve un plato que luego coloca en una bandeja. Mientras realiza esta actividad, la mujer canturrea alegremente.
La mujer entra en una habitación en la que está un hombre sentado sobre su cama, con los brazos cruzados. Lleva una enorme bufanda alrededor de su cuello, que le da un aspecto casi cómico. Parece estar muy fastidiado por la situación.

-¿Qué tal, Giullame? ¿Dormiste bien? Aquí te traigo la cena…
-Ana…- responde Giullame, en tono condescendiente- No es necesario que te tomes todas estas molestias…
-Para mí no es ninguna molestia. (Se sienta sobre la cama, dejando la bandeja a un lado)  Cuando uno quiere a alguien nunca es una molestia hacer este tipo de cosas… (Giullame se encoje de hombros, y mira hacia a un lado) ¡No seas así, Giullame! Yo me preocupo por ti...Déjame ver si… (Lleva su mano sobre la frente de Giullame, luego la aparta, con expresión de sorpresa y preocupación) ¡Giullame, tú no estás bien! Tienes fiebre. (Se levanta de la cama, revisa los cajones del velador al lado de la cama. Ana lanza una exclamación de fastidio)  ¡No hay! ¿Te las tomaste todas, Giullame?... (Giullame asiente con la cabeza. Ana toma el abrigo que está en el cuarto y se lo pone) Será mejor que me vaya ahora a la farmacia, antes que la cierren
-Mira la hora que es, Ana…No es necesario que te tomes tantas molestias por…
-Ya te lo he dicho, para mí, no es ninguna molestia. Tú quédate en cama, que no me tardo. (Le da un beso en la mejilla a Giullame y sale de la habitación)
La siguiente escena comienza con una toma exterior, a la calle. Es de noche, pero no hay nadie, ni siquiera se oye a algún auto pasar cerca. La luz de los faroles le da una atmósfera inquietante al lugar. Aún así, Ana parece no darle mucha importancia a esto, sino que camina calmadamente a través de la calle.
Unos breves instantes después, su expresión cambia, como si acaso hubiese sentido algo extraño. Al darse media vuelta, su mirada divisa a un hombre extraño, con un abrigo negó, mirándola desde el final de la calle. Si bien la débil luz de los faroles y la distancia no le permiten ver bien su rostro, Ana empieza a inquietarse y acelera el paso. Pero el hombre también lo hace, yendo tras ella.
Con el fondo musical “Polymorphia” de Penderecki, Ana empieza a correr, mirando por encima de su hombro. La cámara deja de enfocar el movimiento del hombre, para centrarse únicamente en Ana, la cual parece estar a punto de tener un ataque de pánico, desesperadamente buscando con la mirada a alguien más en la calle. Por fin, unos instantes después, llega hasta la farmacia, en donde el encargado la mira con extrañeza y desconcierto. Ana se detiene y se da media vuelta. No hay ningún rastro del hombre que había estado siguiéndola. La expresión en el rostro de Ana es del más absoluto desconcierto.
Es de día. Esta nueva escena tiene lugar en un Interior de un elegante departamento. Ana está sentada en un sillón con una taza de café en sus manos. A su lado está una mujer con una ropa colorida, la cual refleja alegría, soltura, seguridad, en contraste con el abrigo oscuro de Ana, el cual parece ser demasiado grande para ella. Esa mujer es  Ivette, la amiga de Ana, quien trae una taza de café y la coloca sobre la mesa.
IVETTE: ¿Y bien? ¿Qué pasó luego?
Ana: (Retomando) No pasó nada. Detrás de mí…No había nadie. Aquel hombre se esfumó.
Ivette: (Divertida) ¿Dices que se desapareció así, sin más? ¿Cómo un fantasma?
ANA: (Un tanto avergonzada) Bueno…sí. Eso fue lo que me pareció al menos. Pero me preocupa un poco. ¿Crees que debí habérselo dicho a Giullame?
Ivette: No te preocupes, Ana.  Debe tratarse de  algún vago o mirón, sin nada mejor que hacer que dedicarse a espiar a cualquier mujer bonita que ve por la calle (Ana sonríe, parece un poco halagada por el comentario. Ivette apoya su mano sobre el hombro de su amiga) Ya no pienses más en eso. (Ana asiente. Las dos ríen y conversan.)
Es de día. La escena transcurre en el interior del departamento de Ana y Giullame. Giullame está arreglándose  la corbata frente a un espejo. Ana entra, con marcada expresión de alegría. Se acerca a su esposo y  le da un beso en la mejilla
ANA: Hola, amor.
GIULLAME: (Un tanto distante) Hola, Ana.
(Ana parece un tanto desconcertada por el tono de su esposo.)
GIULLAME: (Sin mirar a su esposa a los ojos) Vengo a las diez. Voy a estar en casa de Rosa, con mi hijo. Si necesitas algo, llámame al celular.
ANA:(Con timidez, se sienta en el sillón) Giullame…Estaba pensando si es acaso tu hijito no podría venir a almorzar en la casa…Yo podría prepararles a los dos algo muy rico y…
GIULLAME:(Con frialdad)  Ana, ya hemos hablado de esto antes.
ANA: (Un poco asustada) Pero yo…Yo no quise molestarte, Giullame. Sólo quería…
GIULLAME: No importa ya. (Se acerca y le da un beso en la mejilla. La expresión de Ana sigue siendo de tristeza e incomodidad) Estaré en casa a las diez. Si puedo volveré más temprano. Adiós.
ANA: (Con tristeza) Adiós, amor.
Giullame sale de la cas. Ana se queda sola en el apartamento. Su expresión es una mezcla de hastío y aburrimiento. Prende la televisión. Se aburre, se levanta, y va a la cocina. La vemos prepararse una taza de té. Pero en vez de tomárselo, estrella la taza contra una pared. Se lleva la mano derecha a la frente. Parece a punto de ponerse a llorar.
Es de noche. Ana sale de la casa.  Lleva una bolsa, con las compras que acaba de hacer en el supermercado. Su expresión es de cansancio y de fastidio.  Entonces cambia a una expresión de sorpresa. El hombre de las escenas anteriores  la está esperando en el mismo lugar en donde Ana le vio por primera vez. Esta vez Ana puede verle claramente su rostro, un rostro frío, peligroso. Ana camina con recelo hasta su casa. El hombre no se mueve, sólo la observa. Ana introduce la llave, pero sus nervios le impiden abrir con rapidez. Ana está muy  asustada. Cuando se vuelve hacia el hombre, este ha desaparecido.
La siguiente escena ocurre en el interior del departamento de Ivette. Ana está sentada en un sofá, su expresión es de mayor preocupación y miedo. Su ropa y su cabello están un tanto descuidados, como si se hubiese arreglado con mucha rapidez. Esta vez Ivette está sentada  a su lado. Dos tazas de té están sobre la mesita.
IVETTE: (Preocupada) ¿Estás segura de que se trataba del mismo hombre?
(Ana asiente)
LUCIANA: ¿Se lo has dicho a Giullame?
ANA: (Niega con la cabeza) No quería preocuparle…A esa hora estaba con su ex esposa y su hijo…Yo no quise molestarlos…
IVETTE: (Indignada) ¿Qué estaba con su ex esposa? (Se levanta y se cruza de brazos. Su expresión es de reproche) Ana ¿Hasta cuándo le vas a permitir a ese hombre que haga lo que quiera, tratándote como si acaso no tuvieras ninguna importancia en su vida? Si Giullame te quisiera, no llevaría una doble vida, teniéndote a ti al margen. ¡Si es que aún ama tanto a su ex mujer, entonces, que te lo diga y que deje de jugar contigo!
ANA:(Con algo de angustia) Ivette, por favor, no digas eso.
IVETTE: (Con el mismo tono de antes) ¿Y qué esperas que te diga? ¿Qué vayas, y te dejes maltratar por ese sujeto? ¿Qué te vuelvas una esposa mártir como tantas otras?
ANA: (Insegura) Giullame es un hombre bueno…Yo sé que él me quiere…es sólo que…Bueno…(Incómoda) Yo entiendo que le es muy difícil dejar atrás toda su vida pasada…Pero aún así, él me ha dado su tiempo, sus atenciones…Ningún otro hombre ha hecho eso por mí antes, Ivette. Ninguno. Además…Yo entiendo porque está tan unido a su hijo… (Parece a punto de ponerse a llorar) Eso es algo que yo jamás podré darle. (Agacha la cabeza)
(Ivette se calma. Se sienta a su lado, y la abraza.)
ANA: (Llorando) Yo siempre quise tener una familia…Un hijo… ¿Por qué el Señor tuvo…Tuvo que hacerme así, incapaz de tener hijos?
IVETTE: Ya, Ana. (La reconforta) No digas eso. Tú eres una gran mujer, hermosa e inteligente. Yo estoy segura de que muchos hombres  quisieran tener a una esposa como tú, Ana.
(Ana apoya su rostro en el hombro de su amiga)
Es de noche. Ana camina por la calle en dirección hacia su casa. La vemos mirar a los lados, con desconfianza. No se ve a nadie cerca. Ana entra a su departamento. Llama al ascensor. Pero mientras espera, le parece ver a alguien al final del pasillo. Con expresión de horror, comprueba de que se trata del mismo hombre que vio en la calle, las dos noches anteriores. Ana empieza a retroceder lentamente, y el hombre comienza a caminar despacio en dirección hacia ella. Ana, aterrada, corre hasta las escaleras, y sube velozmente. Mientras sube vemos al hombre subir detrás de ella.
Ana entra a su departamento, y se encierra. Retrocede, jadeando y respirando agitadamente, hasta ponerse de espaldas sobre el espejo en el cual se miraba su esposo. Parece intentar calmarse, pero en ese momento se escucha un fuerte golpe sobre la puerta. Ana está aterrada. Luego otro. Los golpes cesan. Ana permanece tensa. Se escucha el ruido de una llave siendo colocada en una cerradura. La puerta comienza a abrirse lentamente. Ana se lleva las manos al rostro y grita. Entonces se revela que la persona que ha entrado es Giullame.
Giullame: (Sorprendido de ver a su esposa llorando, sentada en el suelo) Pero…Ana… ¿Qué ocurre? ¿Por qué estás así? ¡Dios!
(Ana lo mira por unos instantes, sin dejar de sollozar. Ana se levanta y camina hasta su esposo, al cual da un fuerte abrazo, sin dejar de llorar)
ANA: (Sollozando) Giullame… ¡No me dejes nunca, por favor! Por favor…Yo…Yo no podría vivir sin ti…Nunca…Nunca…
GIULLAME: (Le acaricia el cabello, y la abraza. Parece un tanto incómodo por la situación) Ya Ana, todo va a estar bien…Te lo prometo…
(Los dos aparecen reflejados en el espejo. Pero la expresión de Giullame revela que sus palabras no son del todo sinceras.)
Es de día. Nuevamente la escena transcurre en el apartamento de Ivette. Ana está sentada en el sofá. Su ropa está muy desarreglada y su cabello está descuidado. Ivette  coloca una taza de té en la mesita. Ana lo toma entre sus manos, sin poder dejar de temblar. No despega la vista del suelo. Ivette apoya la mano sobre el hombro de su amiga.)
IVETTE: Ana, tenemos que hablar. Lo que te ocurre es algo muy grave…Tal vez deberías…
(Ana no responde. No deja de mirar al suelo, mientras que en sus manos tiemblan el plato y la taza de té. Ivette intenta hacerle reaccionar, sin resultado)
IVETTE: Ana, necesitas ver a un doctor. Urgentemente.
Ana no responde. Suena el teléfono. Ana rompa la taza con sus manos, las cuales empiezan a sangrar.  Ivette observa esto con tristeza y asombro. Se acerca a su amiga y la abraza. Pero Ana no deja de temblar. El teléfono sigue sonando
Es de día. Giullame  está en la cocina, sirviendo comida en unos platos colocados en una bandeja.  Junto con la comida, hay algunas pastillas y un vaso con agua. Giullame entra en la habitación de la misma forma en que Ana entró al comienzo. Pero esta vez es Ana quien está entada sobre la cama, con la bufanda al cuello. La televisión está prendida. Ana parece estar un tanto distraído, mirando hacia ningún lugar en particular. Observa en silencio como su esposo pone la comida en el velador al lado de la cama, para luego sentarse a su lado.
GIULLAME: ¿Y bien? ¿Te has sentido un poco mejor últimamente? (Apoya su mano sobre las manos de su esposa) ¿Te has tomado todo tal como lo indicó el doctor?
(Ana asiente)
GIULLAME:(En tono condescendiente) Bien… ¿Necesitas algo? ¿Te gustaría que te trajera algo?
(Ana agacha la cabeza. Los dos permanecen en silencio. Los ruidos de la televisión son lo único que rompe el silencio de la escena.)
GIULLAME:(Serio) Ana…Me están esperando…Yo les dije que iba a ir…
(Ana le toma la mano a su esposo, apretándola.)
GIULLAME: Ana, tranquilízate. Recuerda lo que conversamos. (Sonriente) Te prometo que hoy volveré mucho más temprano. Te traeré algo, si quieres. ¿Está bien?
(Ana duda unos breves momentos antes de contestar. Por fin, suelta la mano de su esposo, y le sonríe, aunque débilmente. Giullame la besa en la mejilla. Le vemos arreglándose para salir. Luego se despide de Ana y sale del departamento.  Ana se queda viendo la televisión. Parece un poco más tranquila que en la escena anterior, aunque un poco inquieta. Va a la cocina. Se prepara un té. Parece un poco aburrida. Apaga la televisión. Observa por la ventana por unos instantes.  Mira a su abrigo, colgado en la habitación. Permanece pensativa por unos instantes. Por fin, toma una decisión, y toma su abrigo y su bufanda. Se alista y sale del departamento.
Ana  aparece en la calle, llevando una bolsa con cosas que ha comprado para la casa. Mientras camina, mira a los lados. La calle está bien iluminada, y todo tiene un aspecto de calma y normalidad. Incluso el paisaje otoñal de escenas anteriores parece más alegre, reverdecido.  Ana, al ver esto, sonríe, suspirando aliviada. Entra a su departamento. Deja las cosas en la cocina. Parece estar mucho tranquila.  Entonces, se quita la bufanda delante del espejo. Pero su rostro adquiere entonces una expresión de espanto: Vemos, reflejado en el espejo, al hombre que la había estado siguiendo en las primeras escenas, vestido de la misma forma, y con el mismo aspecto amenazante. En tan sólo un segundo, Ana se da media vuelta y pega un grito de horror, justo en el momento en el que el hombre se abalanza sobre ella. (Fundido en negro)
Esta última escena transcurre de día, en la entrada de un cine. Giullame está en compañía de un niño de unos ocho años. Lleva una gorra y tiene un globo en sus manos. La gente pasa a su lado, riendo y conversando sobre la película que acaban de ver.
NIÑO: ¿Ya nos vamos papá? ¡Tengo hambre!
GIULLAME: (En tono cariñoso) ¡Espera un momento, Pierre!: Estoy esperando a una persona. (Se acerca a ellos el hombre que había estado acechando a Ana desde el comienzo del cortometraje) Justamente allí está. Espérate aquí quietecito, Pierre. (El niño  no dice nada, sino que observa con mucha curiosidad y atención como su padre le habla al hombre misterioso. Entonces, saca de su bolsillo un fajo de billetes, y se lo entrega. El hombre, sin decir nada, mete el dinero en su bolsillo y se va. Giullame se acerca a su hijo)
GIULLAME: Bueno, Pierre, vámonos ya. Tu madre debe estar esperándonos. (El niño se levanta y camina tomado de la mano de su padre)
NIÑO: (Pensativo) Papá… ¿Quién era ese señor?
GIULLAME: Es un amigo mío, Pierre…Acababa de hacerme un favor.
(El niño lo mira con algo de extrañeza, como si no creyera sus palabras.)
GIULLAME: (En tono alegre) Tengo buenas noticias: Desde mañana, tú y tu mamá van a venirse a vivir conmigo a mi departamento.
NIÑO: (Emocionado) ¿De veras papá?... (Un poco preocupado) Pero ¿Va estar allí esa mujer tan horrible, papá? ¿Le dijiste que se fuera, como yo te lo pedí desde hace días?
GIULLAME: No te preocupes por ella, hijo: Se ha ido para siempre. Ya nunca más nos va a molestar.
NIÑO:(Muy feliz) ¡Qué bueno! ¡Gracias papá! (Se abrazan, mientras la cámara se aleja lentamente. La luz, el lugar, la gente; todo parece ser perfecto.)

Notas del director:
·        El aspecto físico de Ana, el personaje interpretado por Audrey Tatou, enfatiza su delicadeza, tanto física como emocional. Para ello, su vestuario revela una personalidad melancólica y tímida, opuesta a la vitalidad e independencia de su amiga, Ivette. La actuación de Audrey Tatou enfatiza su dependencia emocional hacia su esposo, así como la fragilidad de su equilibrio mental.
·        Las escenas transcurren en el orden que son narradas.
·        En cada escena en la cual a parece el hombre misterioso se escucha “Polymorphia” de Penderecki.
·        “Three to get ready” se escucha en la última escena, en la entrada de un cine.



13 comentarios:

  1. Qué hermoso reparto!! Vincent Cassel y Albert Dupontel!!. Muy cuidadas las escenas, me ha gustado mucho. Lástima que está caído el link del segundo tema. Además de que me abren el festival con cine francés!! jajaja qué más puedo pedir! Felicidades para älvaro!!!

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  2. vaya manera de iniciar el festival con un excelente corto francés! muy buen reparto y excelente banda sonora! saludos!

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  3. Jaja! Buenisimo el final! Que macabro niño! Me gustó mucho la construcción de personajes. Si bien la banda sonora está bien, me parece que no va mucho con la estética de la historia. En especial "Three to Get Ready". Pero aún así está bastante bien. Hubiese estado bueno que cuides un poco los errores de tipeo, para hacer más llevadera la lectura. Pero en general está muy bien el texto. Felicidades. Buena forma de abrir el festival (me tomaron por sopresa!)

    Saludos!

    PM

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  4. Excelente obra de suspense para empezar el festival. A mi el final me ha pillado desprevenido tambien jeje.

    Solo queda dar las felicidades al creador por este genial corto. Espero que me de tiempo a enviar mi corto de animacion jaja

    Saludos!

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  5. Un aperitivo perfecto para el directedby4, al principio tengo mis dudas, debo confesarlo, como en casi todas las pelis independientes europeas que observo. Pero al final, todas me quedan gustando, "Mi Dulce Ana" no es la excepción. BIEN HECHO!

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  6. Geniales las partes en que Ana es seguida por el individuo. Y el final, aunque sencillo, esta bien narrado y contruido!
    Me ha gustado ; ) - Quiero más!!

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  7. Una obra de suspenso inteligente y bien construida. Me gustó el personaje de Tatou. Como todos dicen, ha sido una buena manera de abrir el festival.

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  8. Ojo que el personaje de Tatou ya la veo nominado eh!!! ;-)
    Muy buen relato, genera el suspenso adecuado, confunde como se debe para alejarnos de la resolución. Muy bien logrado. La música que acompaña a las persecusiones es extraordinaria. Buenísima manera de abrir el Festival ;-)!!!

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  9. Audrey Tatou Excelente.
    Gran Ritmo para retratar la historia y escenas muy bien acabadas.
    Excelente Final.
    Una sencilla historia que marca de gran manera este inicio del Festival.

    Felicidades.

    Saludos!

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  10. Un corto que me gusto mucho, aunque se me hizo predecible me gusto y me cautivo hasta el final. Excelente el personaje de Audrey.

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  11. Ya tenemos sucesora de Mejor me voy. Trama viva con unos personajes que esconden muchas cosas. La elección de Tatou es excelente. Y ya podemos decir que es uno de los finales más sorprendentes de todos los Directed by. Felicidades!

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  12. La narracion es absorvente, y la construccion de personajes, en especial el de Ana, es muy bueno. Siento que falla un poco en el final pero no demerita el conjunto de la obra, que tiene su mejor momento en las escenas de suspenso.

    Suerte

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  13. Corto de suspenso muy bien elaborado... me hubiera gustado un final diferente. El tema "Polymorphia" muy bueno. Y que decir del personaje de Tautou, y la colorida y gran Binoche.

    Algo muy sencillo a comparación de las obras a las que nos tienes acostumbrados Álvaro, muy buena.

    Buen inicio del festival...

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